Recibió por mensajería la muñeca sexual cuya publicidad prometía «realismo extremo». Con cuidado, casi con veneración, la sacó del empaque. Tal como la había pedido, era asiática, con hermoso pelo castaño, grandes y exuberantes pechos, cuerpo elástico, piel hiperrealista con pliegues y protuberancias internas muy prometedoras… La enchufó a la corriente para que se cargara y actualizara un software con el que podría hablar con su dueño. Mientras tanto, él pacientemente preparó todo para el primer encuentro: música suave, luz de velas, whiskey y el mejor lubricante a la mano.
En cuanto pudo activarla, la muñeca cumplió lo prometido: era tan real que enseguida le dijo que solo lo quería como amigo.
Autor: Ana Laura Piera Amat / Tigrilla
pildoras para soñar 
Hola Ana, debe ser por eso que la perfeccion me da recelo jajaja, gran micro, un abrazoooo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Es lo que tiene la inteligencia, aunque sea artificial, que no quiere malos royos, ni relaciones por compasión.
Ana, un micro muy bueno, con ese final me has hecho reír,,, de pena. Jajaja.
Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja Ángel, sin duda la I.A es como su nombre lo indica: «inteligente». Un abrazo!
Me gustaMe gusta
Jajajajajaja fascinante, Ana. Te superas, sin duda. Saludos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Alejandro! Te mando un abrazo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
👏🏼👏🏼👏🏼¡me gustó mucho! Ya me zambulliré en tu espacio. Escribes genial. Saludos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Me he quedado como el caballero: sin palabras.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja, por algo les llaman «inteligencia» artificial. Saludos…
Me gustaLe gusta a 1 persona
A veces la inteligencia solo sabe ser artificial.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muy bueno! Me causó gracia el final. Y te felicito por poder armar una historia en tan pocas líneas! Un saludo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Flor, muchas gracias por visitarme y por tu comentario. Quise ir a tu espacio pero me aparece como no disponible. Si pudieras dejarme un link o la direccion https con gusto paso para ver tu contenido. ¡Saludos!
Me gustaMe gusta
Excelente micro Ana, y por supuesto, las cosas claras desde el primer momento 😉 para que no haya malentendidos jajaja. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Sabius! Gracias por pasarte!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja. Buenísimo. Me ha hecho reír mucho. Gracias por eso, Ana.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Edgar, me agrada que te haya hecho reír. Saludos y gracias por pasar.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Siempre te leo, solo que lo había tenido que suspender por un par de semana, pero aquí estoy.
Me gustaLe gusta a 1 persona
jajajaja 😁 ¡Que bueno!! Lo he vuelto a leer y de nuevo solté la carcajada jajaja 😁 Un abrazo 🐾
Me gustaLe gusta a 1 persona
Me agrada que te guste, saludos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Vaya, yo pensé que iba a decir que le dolía el microchip por haber usado la recarga rápida y esperara hasta mañana, Le hubiera salido mejor el modelo buscona aunque dicen que esas para darle más realismo llevan incorporado un lector de VISA o Mastercard y te dejan seca la cuenta. Saludos Ana 😁🖐🏼
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jajaja hubiera estado muy bueno lo del microchip. Saludos!
Me gustaMe gusta
La verdad, esperaba algo macabro al final por alguna razón, así que me ha sorprendido aún más cuando he terminado de leer. Muy divertido 🤣🤣
Muy buen trabajo en serio.
Un saludo,
Borja
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias por pasar! Saludos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Jeje, buenísimo, Ana. Me encanta ese final.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias Marta!
Me gustaMe gusta
jajajaja. Excelente el giro final. Una ocurrencia genial, Ana. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias Pedro!
Me gustaMe gusta
Menudo dinero tirado a la basura que le debió costar la muñeca. La realidad a veces golpea con fuerza.
Me gustaLe gusta a 1 persona